Fases iniciales del pintado del garaje
El primer paso dentro del proceso de pintura para garajes es muy simple: vaciar el garaje por completo.
La segunda fase de este proceso es la limpieza completa; se puede empezar barriendo todo el garaje o aspirando el polvo o suciedad con la sopladora. Es importante que esta fase sea muy cuidadosa con el fin de que no permanezcan residuos ocultos, los cuales generarán problemas en el proceso de pintado del garaje. Techo, paredes y piso son los focos donde se debe concentrar la limpieza. Después del barrido, se debe pasar la hidrolavadora y así la limpieza puede darse por terminada.
La siguiente fase ya es un poco más específica y consiste en observar detalladamente en las paredes o pisos, aquellos lugares que deban sellarse, ya sea porque se encuentren deteriorados o agrietados.
Después de esa verificación se empieza como tal el proceso de pintura; si la superficie donde se pinta es de hormigón, cabe destacar que se deben aplicar varias manos de pintura para hormigón debido a sus cualidades de absorción. Igualmente, si el suelo es de cemento se utilizará pintura para piso de cemento.
Una vez que las paredes y el techo hayan terminado su turno de pintado, se debe continuar con el suelo; este último elemento tiene varias opciones de pintura entre las que se destacan aquellas pinturas selladoras con una excelente relación calidad-precio. Al finalizar, se debe dejar secar el piso muy bien; este paso es muy importante ya que si se pisa el garaje con el suelo fresco, el resultado será desastroso.
